martes, 3 de marzo de 2015

Ahora SÍ, Marmolejo SÍ, es la hora.

 Marmolejo SÍ

Por fin, despierta una parte del verdadero socialismo, y el pueblo lo sabe, representa su esencia, antes de que se contaminara. Hoy la Izquierda se une, con los pies en el suelo, consciente de los problemas y las dificultades a los que se enfrentan los vecinos de Marmolejo y las familias en el día a día.

Esta plataforma ciudadana, representa una realidad, una forma de entender y afrontar la administración pública profundamente diferente a lo que se ha vivido en los últimos tiempos de la gestión de ese otro seudosocialismo en Marmolejo.

Vuelve la ilusión, la fe en la Izquierda honrada, preparada, trabajadora y capaz; esencialmente dialogante y participativa, transformadora, la única que puede representar a los trabajadores y trabajadoras de Marmolejo, la única que los vecinos quieren sentir como propia, la que algunos echaban de menos y llevaban tiempo esperando, la de toda la vida, la que se reconoce en la historia y al mismo tiempo es capaz de mirar al futuro con la confianza que inspira el Pueblo cuando se le conoce, respeta y admira.

 El Pueblo unido es imparable. Ahora SÍ, Marmolejo SÍ, es la hora.

2 comentarios:

  1. Recogido en Pregonao:
    Un emocionado socialista 4 de marzo de 2015, 1:58

    Hoy que han pasado los años y la juventud quedó tan lejos, con el vello de punta y la vista enturbiada tras leer tu artículo querido amigo, me has devuelto la ilusión, me has rejuvenecido, he recuperado la inquietud y ahora comprendo la vitalidad de aquellos viejos luchadores que nunca claudicaron, que supieron transmitirnos a los más jóvenes valores de libertad, igualdad, solidaridad, honestidad, humildad que han marcado nuestras vidas. Aún recuerdo aquellos encuentros en la “Boca del Río” con Manuel, aquel día de difuntos en el que recuperamos la dignidad de los asesinados en la “Loma Candelas”, aquellas noches de verano paseando con José, un viejo concejal republicano maltratado y represaliado por los vencedores de aquella contienda sin sentido, como todas las guerras; cómo no recordar también a Pepe que había que buscarlo a menudo allá en su casilla, en los confines del río Guadalquivir, junto a Trafalgar, a Juan (Matarratas), a Manuel el presidente de la transición que abrió las puertas y buscó relevo entre los más jóvenes, personas íntegras que nunca vendieron su alma al diablo. De todos ellos aprendimos que no hay lugar para el odio y el rencor, aquella fue una generación que sus motivos tenía, pero, optaron por la tolerancia y el diálogo; ese fue su legado para todos nosotros.
    La historia se repite y hoy después de los oscuros años vividos en nuestro pueblo de intolerancia y corrupción, de traición a las ideas y valores del socialismo y de la izquierda, se nos brinda una nueva oportunidad para seguir avanzando y nosotros los jóvenes de antaño que recogimos el testigo de aquellos viejos luchadores, estaremos ahí, con la juventud de ahora ayudando y trabajando para que “MARMOLEJO SÍ” tenga un futuro esperanzador para todos/as.

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  2. Yo tengo un sueño, que un día Marmolejo resurgirá del lastre de un falso socialismo de chichinabo.
    Se acabaran:
    Las listas negras.
    El amiguismo en las bolsas de empleo.
    El enchufismo directo.
    La manipulación de las listas PER donde salían los mismos una y otra vez.
    El protagonismo del funcionario en el ayuntamiento, señores que soy yo¡¡ el ciudadano de a pié el protagonista, el que paga el que mantiene el servicio en definitiva el CLIENTE.
    Se acabó el político sin oficio ni beneficio a la espera de un sueldo, de una comisión y de todo lo que pueda llevarse.
    Se acabaron las cadenas de favores.
    Sueño con una transparencia real y la vuelta del poder a la ciudadanía.
    FUERA el falso socialismo imperante por los que creen representarlo, no son ellos los que a mí me representan hace tiempo que se vendieron por unas pocas monedas.
    Su momento pasó, es hora de quitarnos la máscara del miedo y dar la cara.
    Yo apuesto por MARMOLEJO SÍ es mi opción, es mi decisión.
    Un saludo Ugetista.

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